Por larespuestacl 
La Contraloría General de la República ha tomado una drástica medida contra el alcalde de Macul, Eduardo Espinoza, quien, a pesar de tener suspendida su militancia en el Partido Republicano de forma simbólica, se enfrenta a un sumario administrativo tras revelar que salió del país mientras se encontraba con licencia médica. Esta resolución exenta, firmada el 17 de junio, establece la apertura de un procedimiento disciplinario con el objetivo de determinar si el edil incurrió en responsabilidades administrativas.
El contexto de esta situación es alarmante. Según el Informe Consolidado de Información Circularizada (CIC) N.° 9, más de 25,000 funcionarios públicos habrían desobedecido sus reposos médicos al viajar al extranjero entre 2023 y 2024. Este tema fue traído a la luz por el concejal Michael Urra, quien pidió a la Contraloría que liderara la investigación, planteando que el uso indebido de licencias médicas no solo deteriora la fe pública, sino que también perjudica a trabajadores que legítimamente requieren descanso.
El evento en cuestión tuvo lugar el 3 de marzo de 2024, cuando Espinoza cruzó a Tacna, Perú, en medio de su licencia. Aunque alega que lo hizo bajo recomendación médica debido a ansiedad provocada por hostigamiento laboral, es cuestionable ya que el día previo fue visto como entrenador en un partido de fútbol en Arica. Tras la controversia, el Partido Republicano comunicó que el alcalde había decidido suspendere su militancia, un gesto simbólico que no tiene validez legal.
El futuro de Espinoza pende de un hilo, ya que el sumario podría resultar en sanciones que van desde una simple amonestación hasta su destitución. Este episodio ha elevado las tensiones dentro de la comuna, donde ya existían críticas a su estilo de gestión.