El sueño continúa siendo uno de los grandes enigmas para quienes lo estudian, ya sea desde la perspectiva de la evolución o desde el punto de vista de la medicina. Sabemos que el sueño es importante para nuestro bienestar fisiológico y psicológico. Durante décadas de estudio hemos ido descubriendo algunas de las cosas que convierten al sueño en algo más que un simple periodo de reposo.
Y seguimos descubriendo nuevos detalles.
Un nuevo estudio ha observado que, durante el sueño, las neuronas del hipocampo se predisponen para el aprendizaje de lo que vendrá en la jornada siguiente. Este hallazgo permite comprender nuevas maneras en las que el sueño se convierte en un factor fundamental en la consolidación de nuestros recuerdos.
El sueño es imprescindible para el descanso, pero sabemos que es más que eso. Durante el tiempo que permanecemos durmiendo, nuestro cerebro pasa por una serie de etapas en las que alterna períodos de mayor y menor actividad, siendo algunas claves para soñar.
Este estudio se centró en los engramas, las interconexiones neuronales que permiten que algo tan abstracto como la memoria se materialice en nuestro cerebro. Detectaron una nueva población de neuronas denominadas “células pre-engrama”, que muestran una sincronización creciente durante el sueño post-aprendizaje. Esto indica que estas células codifican experiencias de aprendizaje futuras.
Los avances en la investigación se lograron mediante técnicas de imagen avanzada que permitieron al equipo medir la actividad neuronal de ratones antes, durante y después de experiencias de aprendizaje. Todo esto se plasmó en un artículo publicado en la revista Nature Communications.
Curiosamente, este proceso de afianzamiento de nuevas memorias se produce simultáneamente con la consolidación a posteriori de las memorias ya adquiridas, reflejando una increíble complejidad en las funciones del sueño.