Por larespuestacl 
El emblemático Colo Colo suma otra decepción en su año centenario, tras una humillante goleada de 4-1 en el clásico frente a la Universidad Católica, un resultado que deja huella en la historia del club.
En el Estadio Monumental, un escenario que prometía ser de festejo, los ánimos se caldearon desde el inicio. La sorpresa llegó a los 23 segundos, cuando Cristián Cuevas aprovechó un error del arquero Fernando De Paul, quien no pudo controlar la pelota después de un centro. A pesar de los reclamos de De Paul por una supuesta falta de Zampedri, el árbitro no cambió su decisión y el gol fue validado.
Las tensiones continuaron durante el partido. Fernando Zampedri se mostró frustrado con su compañero Branco Ampuero, lo que llevó a una discusión durante el primer tiempo. En medio de este ambiente tenso, los hinchas expresaron su descontento con una pancarta que rezaba: ‘Jugadores mediocres. Sientan la camiseta. Somos Chile’.
Las reacciones no se hicieron esperar. El técnico Jorge Almirón, oficialmente en la cuerda floja, fue abucheado, y la salida de Esteban Pavez, quien ingresó en el segundo tiempo, también fue recibida con pitos. Vidal, aunque sustituido, no se quedó atrás y siguió reclamando desde la banca.
Los incidentes no se limitaron al terreno de juego. Un proyectil impactó a Alfred Canales de la UC mientras calentaba, obligando a los jugadores a cambiar de lugar. A pesar de las advertencias, algunos hinchas continuaron lanzando objetos, lo que llevó al entrenador de la Católica, Daniel Garnero, a expresar su indignación frente al árbitro.
La violencia entre hinchas también fue protagonista. Durante el partido, se registraron peleas en las gradas, evidenciando la creciente tensión entre los seguidores albos.
Tras el encuentro, el exjugador Nicolás Castillo no tardó en publicar en sus redes sociales una burla relacionada con el partido, ironizando sobre la situación con emoticones de risa. Un final desalentador para el ‘Cacique’, que busca revertir una crisis que atenta contra su legado.