El alcalde de Santiago, Mario Desbordes, ha desatado una ola de reacciones tras su discurso inaugural en las fondas del Parque O’Higgins, donde aprovechó la ocasión para lanzar críticas a la extinta Convención Constitucional en un intento por defender la bandera chilena.
Durante su intervención, Desbordes afirmó que “Chile nace del encuentro de dos mundos, un encuentro que produce tensiones y conflictos, pero que avanza gracias a momentos de diálogo y concordia, donde el reconocimiento de la diversidad del otro no anula la unidad de Chile representada en su bandera, símbolo sagrado que algunos quisieron mancillar, recibiendo el castigo en las urnas”. Este comentario fue recibido con aplausos por aquellos que se inclinaron por el Rechazo en el plebiscito.
Sin embargo, las redes sociales no tardaron en inundarse de críticas hacia el edil. Los usuarios señalaron que la propuesta constitucional nunca contempló la modificación de los símbolos patrios. Comentarios como “Desbordes sigue metiendo la pata” y “Esto quiere la derecha Pro Matthei-Kast, dividir a los chilenos” reflejaron el descontento generalizado.
Una de las reacciones más contundentes fue la del escritor y exmiembro de la Convención, Jorge Baradit, quien, a través de su cuenta en X, acusó a Desbordes de ser un “mentiroso repugnante” y le exigió pruebas sobre los supuestos cambios a los símbolos nacionales. Baradit añadió que se arrepentía de haber considerado a Desbordes como un posible interlocutor de diálogo en la derecha.
El episodio ha reavivado el debate sobre la forma en que la política se infiltra en celebraciones que, en teoría, deberían ser un espacio de unidad y celebración familiar.